dijous, 16 d’octubre del 2008

La esperanza de erradicar la polio en África


La polio, una enfermedad que en occidente suena a algo pasado, sigue causando parálisis a miles de niños en el mundo, especialmente en Nigeria, que junto con la India registró el 88% de los casos de 2007. Controlar el virus en estos países es crucial para lograr su erradicación. Las estrategias puestas en marcha parecen tener éxito en la república africana, aunque será necesario, según los expertos, un último esfuerzo para expulsar al patógeno del continente negro: generalizar el uso de la vacuna monovalente y hacer que llegue al mayor porcentaje posible de la población.

La primera vacuna contra el virus de la poliomielitis, la conocida como trivalente, la desarrolló en 1963 Albert Sabin y pronto se popularizó -en detrimento de las soluciones monovalentes anteriores- porque inmunizaba frente a las tres cepas de este patógeno lo que simplificaba el procedimiento profiláctico. Décadas después, con la cepa tipo 2 extinta desde 1999, la experiencia está demostrando desde 2005 que lo más eficaz es volver atrás en esa economía de esfuerzo y emplear las formas monovalentes contra los tipos 1 y 3 en aquellos lugares en los que la incidencia de la enfermedad es alta.
Un estudio publicado en la revista 'The New England Journal of Medicine' así lo demuestra. La vacuna oral monovalente del poliovirus (mOPV1), recientemente introducida en Nigeria, es cuatro veces más efectiva que la profilaxis trivalente para proteger a los niños y tiene el potencial para acabar con el virus tipo 1, el que más casos produce, en este país africano.
Mientras esta última confiere una protección del 16% con cada dosis, una sola toma de mOPV1 supone un 67% de posibilidades de inmunización frente al virus, según los datos recopilados en este trabajo por científicos de la Escuela Universitaria de Londres (Reino Unido) y colaboradores de diversos países. Gracias a esto, los casos de poliomielitis tipo 1 cayeron un 86% en 2007, comparado con el año anterior.
Otro estudio impreso en las páginas de la citada revista ha comprobado la superioridad del preparado oral monovalente frente al trivalente a la hora de inmunizar a los menores de cinco años y su "potencial contribución para alcanzar el objetivo global de erradicar la polio", según las conclusiones de sus autores.
Hacen falta más esfuerzos
Pero el statu quo es débil. Hasta que el patógeno no desaparezca por completo, nadie puede garantizar que no se repita lo sucedido en 2003, cuando la suspensión temporal de la inmunización en un solo estado del país provocó una epidemia nacional y la aparición de casos en 20 naciones que habían erradicado la enfermedad.
"En Nigeria ahora tenemos una vacuna efectiva y hemos empezado a ver mejoras. Debemos llegar hasta los últimos reductos de niños sin inmunizar para alcanzar la eliminación del virus en este país, hecho que tendrá un enorme impacto en las perspectivas de la erradicación global", ha explicado Helen Jenkins, líder del equipo británico.
Una vez identificada el arma para luchar contra la polio, queda mejorar la logística para lograr que esa vacuna llegue al mayor número posible de niños. Esa es la clave en el país del golfo de Guinea, alcanzar un nivel de inmunización suficiente para hacer que el virus desaparezca. La papeleta más complicada está en las provincias del noroeste, pero hay sitio para la esperanza ya que la cobertura de la vacuna ha aumentado notablemente en los últimos años. Caso distinto es el de la India, donde los factores ambientales interfieren en la eficacia de mOPV1, que, no obstante, es tres veces más eficaz que la trivalente.
Elliot Ehrenfeld y Konstantin Chumakov, de los Institutos Nacionales de Salud y la Agencia Estadounidense del Medicamento, respectivamente, van un poco más lejos en un editorial sobre estos estudios. Esbozan el posible escenario que vivirán estos países en desarrollo cuando logren erradicar el virus; deberán adoptar mecanismos de inmunización similares a los de occidente (inyecciones de virus inactivado) y para entonces la comunidad internacional tendrá que haber encontrado la forma de abaratar sus costes.