dijous, 11 d’octubre del 2007

El Senado aprueba la ley que regula la comunicación de las personas sordas

El Pleno del Senado aprobó ayer jueves definitivamente y por unanimidad el proyecto de ley por el que se reconocen las lenguas de signos españolas y se regulan los medios de apoyo a la comunicación oral de las personas sordas, con discapacidad auditiva y sordociegas.

El texto definitivo de esta norma es el que aprobó el
Congreso de los Diputados el pasado 28 de junio, ya que el PP y el PNV retiraron las enmiendas que habían presentado en el Senado.

El ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera,
que defendió este proyecto, comenzó dando la bienvenida a los diversos colectivos de personas sordas presentes en la tribuna de invitados de la Cámara Alta, especialmente a un grupo de niños con discapacidad auditiva.

Durante su intervención, que fue traducida a la lengua de
signos, Caldera calificó de "histórica" esta ley, que, según
dijo, "procura el bienestar y la dignidad de un amplio colectivo que lo venía reclamando desde hace mucho tiempo".

Además, el ministro de Trabajo y Asuntos Sociales se dirigió
a los niños con discapacidad auditiva, a quienes dijo que "esta ley, que marcará un antes y un después en la vida colectiva de los españoles, es una ley fruto del consenso de todos" los parlamentarios y de los distintos colectivos de personas sordas.

Resaltó que esta norma "es una pieza legislativa de
justicia, por lo que supone del reconocimiento al derecho a la comunicación entre todos, sin ningún de discriminación, del derecho, en definitiva, a la plena integración social".

Caldera añadió que esta ley "pretente dar respuesta a la
necesidad de normalización, a través de la comunicación de las personas sordas, con discapacidad auditiva y sordociegas, atendiendo al principio de diversidad de este colectivo".

Caldera detalló los aspectos técnicos de la ley y volvió a
dirigirse a los niños con discapacidad auditiva, a los que les
dijo que " dentro de poco tiempo podrán ver en televisión un subtitulado para los dibujos animados y para los informativos".

"Vamos a conseguir que haya un subtitulado que permita
traducir a vuestro lenguaje lo que están diciendo los personajes que están apareciendo en televisión", recalcó el ministro, que aseguró estar "emocionado" por el trabajo de los parlamentarios "en favor de la dignidad humana y en favor de la superación de las barrerasque impiden la plena integración y la plena igualdad".

LENGUA DE SIGNOS

La citada ley establecerá el servicio de intérprete de
lengua de signos en lugares públicos como estaciones y
aeropuertos y facilitará subvenciones públicas a quienes
precisen de ayudas técnicas, como implantes cocleares o
audífonos.

Concretamente, el texto indica que tendrá que haber
servicios de intérprete de lengua de signos en las actividades culturales, deportivas, de esparcimiento y de ocio que se determinen, como cines, teatros y museos nacionales, así como en las estaciones de transporte marítimo, terrestre y aéreo en las que las autoridades lo consideren necesario por su volumen de viajeros.

Igualmente, deberán facilitarse estos servicios de
intérprete de lengua de signos española y de las lenguas de signos propias de las comunidades autónomas en las
administraciones educativas, así como en los centros sanitarios que atienden a personas sordas, con discapacidad auditiva y sordociegas.

Según el texto, los poderes públicos deberán facilitar los
servicios de intérpretes en lengua de signos española o en las lenguas de signos propias de las comunidades autónomas también en el ámbito de las administraciones públicas.

Además, el proyecto de ley que regula la comunicación de las personas sordas pretende facilitar también la participación de este colectivo en el ámbito político.

Por este motivo, insta a las Cortes Generales, asambleas
legislativas de las comunidades autónomas, diputaciones
provinciales y corporaciones y entidades locales a ofrecer el
servicio de interpretación en las lenguas de signos española y propias de las autonomías que la tengan en las reuniones de carácter público o de interés general cuando participen personas sordas, con discapacidad auditiva y sordociegas y que lo soliciten previamente.

En esta línea, los poderes públicos, partidos políticos y
agentes sociales deberán facilitar la distribución en estas
lenguas de signos de los programas de emisión gratuita y
obligatoria en los medios de comunicación.

AYUDAS TÉCNICAS

En virtud de esta norma, las personas sordas, con
discapacidad auditiva y sordociegas que precisen de apoyos
técnicos, como implantes cocleares o audífonos, podrán recibir ayudas económicas públicas, independientemente de la edad que tengan.

Hasta ahora, este tipo de ayudas estaba previsto sólo para
las personas de hasta 16 años, por lo que el texto, tal y como quedó tras su paso por el Pleno de la Cámara Baja, permitirá beneficiarse de estas ayudas también a los adultos.

Concretamente, la redacción actual de la norma prevé en una disposición adicional que "los poderes públicos, en el ámbito de sus competencias, aporten financiación para la adquisición de apoyos técnicos para personas sordas, con discapacidad auditiva y sordociegas".

PERSONAS SORDOCIEGAS

Otro de los aspectos modificados desde la entrada del texto
propuesto por el Gobierno en el Parlamento es el de las personas sordociegas, que tendrán un apartado específico en la ley para reconocer su situación de especial dificultad.

Con respecto al colectivo de las personas sordociegas, la
futura norma señala que el Ministerio de Trabajo y Asuntos
Sociales deberá realizar un estudio en el que se recoja el
número de personas con sordoceguera, sus condiciones de vida y su ubicación geográfica, para determinar los centros de referencia que deberán crearse para atenderlas.

Por otra parte, el proyecto de ley reconoce expresamente la
"lengua de signos catalana", al señalar que "la Administración General del Estado coadyuvará a financiar el fomento, la investigación y difusión de la lengua de signos catalana".

Por último, la ley crea el Centro Español del Subtitulado y
la Audiodescripción, que impulsa la accesibilidad de los
productos audiovisuales, y el Centro de Normalización de la
Lengua de Signos, cuya finalidad será la de investigar,
fomentar, difundir y velar por el buen uso de esta lengua.

Todos los grupos parlamentarios del Senado expresaron su
apoyo a este ley y coincidieron en alabar la lucha de los
distitnos colectivos de personas sordas durante años para que esta norma sea una realidad y les reconozca y garantice su dignidad.

Tanto los senadores como representantes de los diversos
colectivos de personas sordas presentes en el Senado se
levantaron de sus asientos para aplaudir la aprobación de esta ley, mucho de ellos en la lengua de signos, con las manos en alto y girando las muñecas.